El mismo día en que, en un país, por primera vez en su Historia, se constituye un gobierno formado por mayoría de mujeres, en otro gana las elecciones alguien que, para progresar en la vida, aconseja a las jóvenes casarse con hijos de papá.
O, dicho de otro modo, mientras uno de esos países parece haberse decidido a mirar por fin hacia el futuro (que sea por muchos años), el otro, tan rico en vestigios de siglos remotos, se ancla a lo más rancio, zafio, apestoso del pasado. La hermosa Italia no se merece esa desgracia.
martes, 15 de abril de 2008
Dos países
Etiquetas: Recortes de prensa
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario